viernes, septiembre 23, 2005

A golpes

Creo que anduve demasiado tiempo de pajarita por la vida; apática, “enmimismada" y anestesiada, sin darme cuenta de lo que pasaba en mi inmediato alrededor. Fue por eso que no lo vi venir, sólo sentí el golpe y de pronto estaba en el suelo. Fue un golpe seco, imprevisto, cosa de segundos pero duro, tan duro que aún no me repongo. Y no fue sólo la embestida, el auto siguió adelante sin emitir sonido alguno, pasando sobre mi magullado cuerpo para dejarlo más que herido, adolorido… internamente dolido. Anoté la patente, pero de nada me sirve.
Reconozco la culpa, debí haber puesto atención, debí haber bajado de las nubes antes. Debí, debí y debí, porque este golpe me invalida por un tiempo, me deja atada de manos y con tarea doble: reponerme de dolores y empezar todo de nuevo. Aunque por ahora no quiero moverme, todo duele. No soy fuerte para resistir golpes… ahora sólo quiero dormir.
Pero dicen que a golpes se aprende y, a lo mejor, hace un buen tiempo estaba necesitando uno así. Aunque tal vez, uno no de esta forma, no a estas alturas del año, o con un previo aviso quizás. No sé, sólo sé que aún tengo las huellas de los neumáticos marcadas en el culo.

4 comentarios:

Black Mamba dijo...

Metáfora, sólo metáfora... no se preocupe

theMKöpkeBlog dijo...

Ahh menos mal que es metáfora, al menos es sintoma de que estás bien.
En fin a veces suceden cosas sin que nos demos cuenta. Lo mejor es seguir de pie y continuar, cuesta trabjo al principio pero poco a poco se logran las cosas

Gonzaloieb dijo...

Ufff tantos autos, tantas calles... a veces nosotros mismos nos tiramos cuando viebe uno en marcha. Por eso las marcas.
Saludos

nota: gracias por sus saludos

Jaime Ceresa® dijo...

Yo tb he tenido muchos de esos golpes metaforicos de los cuales hablas...mas de alguno de hecho..y e vez de autos han sido camiones ams de alguna vez.